Digger de Ursula Vernon (2004 ó 2005 - 2011)
Cuando emecé a escribir esta lista elegí los libros que la iban a componer y los ordené. Exceptuando los tres primeros, la posición de los demás es batstante fluctuante, es decir, el que está noveno y el que está décimo podrían perfectamente intercambiarse y la lista seguiría estando igual de "bien". No obstante lo cual, a medida que recorro la lista para escribir las reseñas me van surgiendo dudas, como: Digger, ¿es mejor que, digamos, Megafón?
Si alguno de ustedes (los 10 o 12 lectores)
tiene una respuesta para esta pregunta, hágame el favor de retirarse de este blog. Primero porque las preguntas retóricas no se responden, y segundo porque desde este recóndito rincón de la Internés sostenemos que tratar de dividir los libros entre mejores y peores es de una soberbia rayana en la idotez. Esta lista está ordenada más bien según gustos en el momento de ordenarla, un poco al tuntún. No es que pensé delicadamente cada puesto sopesando meritos y defectos de tal o cual libro.
Y además creo que sí, Digger me gusta más que muchos libros anteriores de la lista. Es una historieta publicada gratis en la web, de género fantástico, jugando con muchos clichés del género y siguiendo muchos otros. El protagonista no es un rey, ni un mago, ni un humilde pastor que es en realidad el heredero del emperador ni nada de eso. La protagonista es una de estas:
Una Wombat llamado Digger of Unnecesarily Convoluted Tunnels
del clan Quartzclaw, quien empieza la historia cavando, como es normal en un wombat, pero su problema es qeu está perdida. Aparentemente se cruzó por alguna burbuja de aglún gas, o aire viejo o algo así y está medio de la cabeza cavando sin parar hace un par de días. Cuando se rescata un poco, sigue lo que todo wombat sabe desde chico que tiene que hacer cuando se pierde: cavar hacia arriba. Y sale en medio de un templo frente a una estatua de Ganesh, quien le dice que el túnel por el que acaba de llegar en realidad no está ahí, cosa que Digger puede comprobar inmediatamente. Y se saca, porque es de pésima educación encantar un túnel ajeno. Ningún wombat en su sano juicio se acerca por ppropia voluntad a nada encantado, mágico, sobrenatural, profético ni divino. Son constitutivamente prácticos.
(Sospecho que se me va a complicar bocha terminar de escribir esta reseña sin colgarme a leer Digger. Y eso que ya lo tengo escrito en papel y sólo lo tengo que pasar.)
Pero Digger se ve envuelta hasta el fondo en una historia
con absolutamente todos esos ingredientes. Gran parte del encanto del libro son sus reacciones al ver cómo se va metiendo cada vez más en cosas, para ella, aberrantes cuando lo único que quisiera es encontrar alguna forma de volver a su casa. Y no quiero contar demasiado sobre con es lo que pasa. Hay situaciones absurdas y cómicas, otras más filosóficas y algunas muy tristes. Otra cosa muy interesante es que como Úrsula Vernon tiene un título de antropología no sólo la mayoría de los elementos míticos que inventa no sólo están basados en leyendas existentes, sino que auno los inventados tienen un nivel de detalle, profundidad y coherencia poco común.
Y además de brillar en la escritura, Úrsula brilla en el arte. Es blanco y negro, variando de "dibujo minimalista en tinta negra" hasta "xilografía" pasando por todas las gradaciones intermedias sin perder nunca el estilo, variando a veces en la misma página. Expone y realza las tensiones, los climas y el humor del texto a fuerza de claroscuros, expresiones caricaturescas (nunca vi una estatua tan expresiva), y dibujos increíblemente detallados y al mismo tiempo minimalistas. Como ya dije casi diez reseñas atrás, no soy bueno para hablar de arte y es por eso que opté por hacer un post ilustrado.
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Básicamente Digger tiene uno de los mejores textos de todos los webcomics que he leído y/o sigo leyendo, uno de los mejores artes y seguramente la mejor combinación de ambos elementos. Durante los aproximadamente dos años que lo leí "en vivo" fue una parte imporatnte de mis martes y jueves, y desde que terminó, en mayo de este año, me sigue faltando algo en la rutina de esos días. Como predije antes, no logré terminar el post sin leerme el libro entero. Y me volví a enamorar y a convencer de su lugar en la lista. Y una vez más puedo decirles sencillamente vayan y léanlo
Cuando emecé a escribir esta lista elegí los libros que la iban a componer y los ordené. Exceptuando los tres primeros, la posición de los demás es batstante fluctuante, es decir, el que está noveno y el que está décimo podrían perfectamente intercambiarse y la lista seguiría estando igual de "bien". No obstante lo cual, a medida que recorro la lista para escribir las reseñas me van surgiendo dudas, como: Digger, ¿es mejor que, digamos, Megafón?
Si alguno de ustedes (los 10 o 12 lectores)
tiene una respuesta para esta pregunta, hágame el favor de retirarse de este blog. Primero porque las preguntas retóricas no se responden, y segundo porque desde este recóndito rincón de la Internés sostenemos que tratar de dividir los libros entre mejores y peores es de una soberbia rayana en la idotez. Esta lista está ordenada más bien según gustos en el momento de ordenarla, un poco al tuntún. No es que pensé delicadamente cada puesto sopesando meritos y defectos de tal o cual libro.Y además creo que sí, Digger me gusta más que muchos libros anteriores de la lista. Es una historieta publicada gratis en la web, de género fantástico, jugando con muchos clichés del género y siguiendo muchos otros. El protagonista no es un rey, ni un mago, ni un humilde pastor que es en realidad el heredero del emperador ni nada de eso. La protagonista es una de estas:
Una Wombat llamado Digger of Unnecesarily Convoluted Tunnels
del clan Quartzclaw, quien empieza la historia cavando, como es normal en un wombat, pero su problema es qeu está perdida. Aparentemente se cruzó por alguna burbuja de aglún gas, o aire viejo o algo así y está medio de la cabeza cavando sin parar hace un par de días. Cuando se rescata un poco, sigue lo que todo wombat sabe desde chico que tiene que hacer cuando se pierde: cavar hacia arriba. Y sale en medio de un templo frente a una estatua de Ganesh, quien le dice que el túnel por el que acaba de llegar en realidad no está ahí, cosa que Digger puede comprobar inmediatamente. Y se saca, porque es de pésima educación encantar un túnel ajeno. Ningún wombat en su sano juicio se acerca por ppropia voluntad a nada encantado, mágico, sobrenatural, profético ni divino. Son constitutivamente prácticos.(Sospecho que se me va a complicar bocha terminar de escribir esta reseña sin colgarme a leer Digger. Y eso que ya lo tengo escrito en papel y sólo lo tengo que pasar.)
Pero Digger se ve envuelta hasta el fondo en una historia
con absolutamente todos esos ingredientes. Gran parte del encanto del libro son sus reacciones al ver cómo se va metiendo cada vez más en cosas, para ella, aberrantes cuando lo único que quisiera es encontrar alguna forma de volver a su casa. Y no quiero contar demasiado sobre con es lo que pasa. Hay situaciones absurdas y cómicas, otras más filosóficas y algunas muy tristes. Otra cosa muy interesante es que como Úrsula Vernon tiene un título de antropología no sólo la mayoría de los elementos míticos que inventa no sólo están basados en leyendas existentes, sino que auno los inventados tienen un nivel de detalle, profundidad y coherencia poco común.Y además de brillar en la escritura, Úrsula brilla en el arte. Es blanco y negro, variando de "dibujo minimalista en tinta negra" hasta "xilografía" pasando por todas las gradaciones intermedias sin perder nunca el estilo, variando a veces en la misma página. Expone y realza las tensiones, los climas y el humor del texto a fuerza de claroscuros, expresiones caricaturescas (nunca vi una estatua tan expresiva), y dibujos increíblemente detallados y al mismo tiempo minimalistas. Como ya dije casi diez reseñas atrás, no soy bueno para hablar de arte y es por eso que opté por hacer un post ilustrado.
Básicamente Digger tiene uno de los mejores textos de todos los webcomics que he leído y/o sigo leyendo, uno de los mejores artes y seguramente la mejor combinación de ambos elementos. Durante los aproximadamente dos años que lo leí "en vivo" fue una parte imporatnte de mis martes y jueves, y desde que terminó, en mayo de este año, me sigue faltando algo en la rutina de esos días. Como predije antes, no logré terminar el post sin leerme el libro entero. Y me volví a enamorar y a convencer de su lugar en la lista. Y una vez más puedo decirles sencillamente vayan y léanlo
Todas las imágenes pertenecen a Úrsula Vernon, usadas sin permiso, aunque que le moleste.
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